Revista MARVIN - Noviembre - Diciembre 2021

Moby – ¿Cuándo fue la última vez que escuchaste de principio a fin una canción?

Este año, el tataranieto de Herman Melville definitivamente no está pensando en jubilarse; lanza su álbum numero veinte: Resound NYC, un ejercicio de reintepretacion de algunos de sus más icónicos temas escritos y producidos entre 1994 y 2010, con la colaboracion de varios invitados. Charlamos con él mismo de ello, además de las hondas vanalidades que la cultura pop proyecta.

Aquí y ahora – Más acá del 84 de Orwell

El colapso. Un sistema en crisis que no hizo lo que prometió, el desarrollo a costa de montones de vidas humanas y de las condiciones ambientales que hacen posibles éstas y las demás vidas. En un lado del mundo: vidas que se debaten en sus likes de redes sociales, la mano invisible del algoritmo trazando destinos que alimentan la matrix e inteligencias artificiales haciendo de asistentes domésticos, pero también de productores de discursos que se suman al ruidoso enjambre del mundo digital. En otros lados del mundo: vidas que no aparecen en ninguna pantalla, batiéndose por el agua, la tierra, el pan.

El polaco – Un rapto divino y el olvido de uno mismo

Felipe era el nieto de mi maestro de inglés. Mi maestro de inglés había perdido dos dedos de la mano izquierda en un accidente automovilístico. Se quedó dormido mientras manejaba en la carretera. Nunca encontraron sus dedos. A su esposa e hijos no les pasó nada.

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Mayor cobertura, mejor servicio

Hacer diseño que te haga sentir

El trabajo de Stefan Sagmeister, diseñador austriaco radicado en Nueva York, se mantiene fiel a uno de los primeros ideales erigidos por el autor y que, importa acotar, puede leerse en una de sus ya clásicas listas de cosas por concretar en la vida: Hacer diseño que te haga sentir.

LA MALA SENDA

LAS VIOLENTAS TRIPAS DE LA COTIDIANIDAD MEXICANA

Artificios para matar al monstruo El mal nunca está en nosotros

Mi cabeza mide ochenta y ocho centímetros y tengo una amplia masa carnosa en la parte de atrás, grande como un tazón. La otra parte parece, digamos, valles y montañas, todos amontonados, mientras que mi cara tiene un aspecto que nadie quisiera describir. Mi mano derecha posee casi el tamaño y la forma de una pata de elefante. El otro brazo y la mano no son mayores que los de un niño de diez años, y están algo deformados...  —John Merrick

In my own time Libros, discos y una mirada ojerosa

1000 discos que hay que escuchar antes de morir, leo en el lomo de un libro en la sección de música. Me pongo de puntillas para alcanzarlo, el peso de la obra me vence.

WIPLASH DEL ROCK TUMBADO AL TRAP & ROLL

Cuentan que se conocieron gracias a las redes sociales y a las mismas bendicen apenas las mencionan, porque sin éstas ni The dirt, el filme que retrata las hazañas de Mötley Crüe, jamás hubieran engendrado el concepto que los une bajo el mismo nombre que un tema clásico de Metallica (al que le borraron una de sus dos letras mudas). Juntos, esquivan las balas que les cuestionan sus actos con temple, seguros de sí mismos al definir sin traspiés su presente y futuro en pocas palabras: \"somos Wiplash, lo que tocamos, principalmente, es rock y nos encanta experimentar con él”.

LOS BUNKERS TIEMPOS TEMPLADOS PARA VOLVER

Apretujados en un sofá, observan la pantalla de la laptop mientras se admiran ante sus viejos atuendos. Analizan el videoclip de “No me hables de sufrir” recordando cómo eran las cosas veinte años atrás, cuando estaban por editar Vida de perros para alcanzar un trajín frenético que, sin remedio, los llevaría a ponerle pausa a su carrera nueve años después. Increíble pero cierto, contra todo pronóstico del tiempo Los Bunkers están juntos, están de vuelta, con música flamante y una gira que legitima el apelativo de clásico que porta su temario. “Ahora todo está más templado”, apuntan, asomándose al espejo negro digital; “y es bonito vivirlo así, ¿cachái? Saboreamos más”.