Todo Lo Que Deberías Saber Sobre Las Dietas Disociadas

Aparecen en la lista de soluciones ‘milagro’ para perder mucho peso en poco tiempo. Pero a las panaceas hay que observarlas con lupa para asegurarse de cuáles son sus verdaderos pros y contras.

- Carmen Lopez

La de la piña, la de los 9 días, la del delfín, la de la cerveza... todas ‘son dietas milagro’ que prometen perder kilos en tiempo récord. Son muy tentadoras antes de las vacaciones de verano o la ‘vuelta al cole’, cuando la buena vida de las vacaciones se nota en el espejo. Si se siguen al pie de la letra, lo más probable es que se consiga el objetivo. Pero nada es tán fácil y estos métodos de adelgazamiento conllevan consecuencias negativas en forma de carencias nutricionales.

¿QUÉ ES LA DIETA DISOCIADA?

Muchos de esos métodos siguen los preceptos de la dieta disociada. El término es habitual, pero ¿qué significa? La doctora Anna M. Aparicio Schwab –experta en Endocrinología, metabolismo y nutrición– explica que consiste en “no mezclar distintos principios inmediatos (descritos a la derecha) en la misma ingesta” para perder peso. Existen tres principios inmediatos:

Hidratos de carbono: hortalizas, legumbres, cereales, verduras, frutas y sus derivados, azúcar, alcoholes, lácteos y productos de la abeja.

Lípidos o grasas: aceites, margarinas, mantequillas, grasas animales y vegetales.

Proteínas: carne, pescado, marisco, fiambres, embutidos magros, jamón, despojos.