LOS UPF BAJO LA LUPA

Los alimentos ultraprocesados están por todas partes, pero sabemos muy poco sobre cuáles son los más peligrosos. La ciencia intenta descifrar el enigma por el bien de nuestra salud.

- TARA HAELLE

HACE UNOS MESES decidí preparar avena como opción de desayuno saludable. Encontré el pasillo de los cereales y me quedé allí de pie frente a las cuatro docenas de opciones que tenía delante, con todas las formas, sabores y niveles de azúcar añadido. Todas me parecían igual de procesadas. Me rendí, salí de la tienda sin avena y con agotamiento emocional. Y eso solo en la sección de avena, por no hablar de los montones de aperitivos, bebidas y condimentos.

Bienvenido a la ansiedad de supermercado que afecta a quienes quieren comer sano pero no saben muy bien cómo. Es probable que conozcas los riesgos para la salud de los alimentos ultraprocesados (UPF), que relacionan su consumo excesivo con una mayor probabilidad de muerte prematura, así como con muchos de sus factores coadyuvantes: deterioro cognitivo, demencia, depresión y ansiedad, varios tipos de cáncer, cardiopatías, inflamación, resistencia a la insulina y enfermedades gastrointestinales y metabólicas.

Lo sorprendente es que los UPF son una parte importante de lo que comemos. La media del consumo de ultraprocesados en Europa es de 328 gramos por día, el 12% de toda la alimentación que se consume. El consumo en España se encontraba algo debajo de la media: 11,5% en el caso de los hombres y 11,4% en el de las mujeres (aunque somos el país de la UE donde más está creciendo). Nada comparado con EEUU donde es un 57%.

La doctora Giulia Menichetti y otros investigadores intentan facilitar la elección en el supermercado abordando la tarea sorprendentemente difícil de averiguar exactamente qué UPF nos perjudica más y por qué. Y pretenden matizar la idea de que cualquier UPF es malo para la salud. "Grandes estudios de población han empezado a demostrar que lo que actualmente se clasifica como alimentos ultraprocesados puede no ser igual de malo para la salud", afirma Menichetti.

DÓNDE ESTÁ EL PELIGRO