Diego Luna, antes que nada, un cinéfilo

Son muchas las etiquetas que Diego Luna ha tenido en sus más de 20 años en la industria del entretenimiento: actor, productor, fundador de Canana Films, jurado en Cannes, director… Sin embargo, él se define de una sola forma, de la cual han salido todas sus iniciativas: un espectador apasionado. Con motivo del estreno de la road movie Sr. Pig, su tercer largo de ficción como director –y que cuenta el viaje en territorio mexicano de un granjero estadounidense, su hija y un cerdo–, el excharolastra reflexiona sobre cómo el cine mexicano se ha alienado un poco del público. 

- Jessica Oliva

Las elegidas, de David Pablos, cinta en la que eres productor, fue la máxima ganadora de la 58 entrega del Ariel. ¿Cómo es que apoyar a nuevos talentos como David te ha transformado como director?

Antes que director, actor, productor, soy público, y como tal quiero ver más cine que me represente y que me rete como espectador. Como actor recibes mucha atención y a veces dan ganas de desviar esa atención a cosas que realmente importan. Eso es lo que me mueve. Uno se enriquece de ver el trabajo de otros. Hoy dirijo gracias a todos los procesos que conocí en mis años de actor. Yo no fui a la escuela, no aprendí formalmente a “hacer cine”, sino siendo testigo del proceso de otros. Por otro lado, a mí como público me interesa que haya más diversidad de voces y siempre voy a participar de la forma en que pueda para que eso suceda.

Sr. Pig es 100% mexicana, a diferencia de tu debut internacional, César Chávez