Diego Sánchez Ancochea, economista de la Universidad de Oxford

Si no hay cambios, el mercado laboral podría segmentarse más, el estado del bienestar sufrir nuevas restricciones y la clase media apostar por el sálvese quien pueda

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Diego Sanchez Ancochea en una fotografía cortesia del Kellog Institute for International Studies, Universidad de Notre Dame.

Este economista y profesor en la Universidad de Oxford es, sin duda, una de las personas que más saben de América Latina y desde ese conocimiento ha escrito El coste de la desigualdad.

Con él charlamos sobre todo lo que podemos aprender de la experiencia latinoamericana para mejorar la situación en otros países del resto del planeta, incluido el nuestro.

Catedrático de Economía Política del Desarrollo, director del Departamento de Desarrollo Internacional y director asociado de la División de Ciencias Sociales de la Universidad de Oxford, Diego Sánchez Ancochea (Madrid, 1974) es un auténtico conocedor de América Latina, con sus luces y sus sombras, y autor del libro El coste de la desigualdad, en el que desgrana las lecciones y las advertencias de los países latinoamericanos para el mundo. Un espejo en el que mirarnos si no ponemos freno a la desigualdad que desde hace años ya se vive en EE. UU. y Europa, sin que España sea una excepción. Una desigualdad que entraña costes económicos, políticos y sociales a corto, medio y largo plazo rompiendo los espacios de entendimiento social y erosionando cada vez más nuestras instituciones. ¿Hay solución para semejante desafío? A continuación está su respuesta.

¿Cómo definiría El coste de la desigualdad?