LA BISEXUALIDAD Y SUS MITOS

LAS PERSONAS QUE SE IDENTIFICAN CON LA ORIENTACIÓN BISEXUAL NI ESTÁN CONFUSAS, NI SE ENCUENTRAN ATRAVESANDO UNA ETAPA PASAJERA, NI TIENEN MIEDO A RECONOCERSE COMO HOMOSEXUALES. ES HORA DE ABANDONAR LOS FALSOS ESTEREOTIPOS.

- CARLOS DE LA CRUZ

Parafraseando el famoso bolero de Machín, ¿se puede sentir atracción por dos sexos a la vez y no estar loco? La espuesta es sí, desde luego. La bisexuaidad, sentir atracción romántica o sexual anto hacia hombres como hacia mujeres, s algo que ha existido siempre. Es coocido, por ejemplo, que en las antiguas recia y Roma estaba admitido socialmene que un hombre mantuviera relaciones on individuos de ambos sexos. En el cao de las mujeres, en cambio, aunque su existencia también está demostrada por la literatura y las representaciones gráficas, “quedan puntos oscuros sobre cuáles eran sus consecuencias sociales”, como indica el experto en filología griega Juan Francisco Martos en su artículo Aspectos de la homosexualidad femenina en Grecia y Roma (2007).

La bisexualidad no es exclusiva del mundo occidental. Hay testimonios de su existencia a lo largo de la historia y en las distintas culturas. La única diferencia está en la aceptación, en que sea más o menos visible, consentida o perseguida.

Para entender la bisexualidad es imprescindible dejar de entender la orientación del deseo como algo dicotómico, es decir, que haya que ser heterosexual u homosexual, sin posibilidades intermedias. El sexólogo Alfred C. Kinsey publicó en su libro