Taller de asana FLEXIONES HACIA DELANTE

El final del verano y comienzo del otoño es buen momento para bajar el ritmo, empezar a recogerse y descansar de la actividad veraniega. En nuestra práctica de asana, esto se traduce en posturas de flexión hacia delante que, por sus características, son posturas de relajación y entrega pero que, debido a nuestros hábitos posturales y vida sedentaria pueden llegar a ser muy retadoras.

- LUCÍA PASSARDI

Es cierto que la mayoría no nos sentimos especial-mente cómodas ni «relajadas» en este tipo de asa-nas. Para que la relajación se produzca es esencial dejar ir las expectativas, tener en cuenta el lugar del que partimos y, sin pudor, utilizar todos los soportes o modificaciones necesarias para facilitar esa comodidad y poder invitar a nuestro cuerpo y nuestra mente a soltarse. Por otro lado la respiración jugará, como siempre en Yoga, un importante papel, ya que gracias a ella podremos transitar las sensaciones, no siempre agradables, que podemos experimentar, y nos ayudará a tener una actitud de entrega y apertura hacia lo que este sucediendo.

Flexiones en los distintos niveles sobre el suelo Empieza dándole movilidad. Desde la postura en descarga de reposo constructivo (tumbados boca arriba) podemos realizar varios movimientos de flexión que ayudan a articular la sección sacro lumbar: Apanasa (Foto 1) y basculaciones (Foto 2).

Desde cuadrupedia: embrión y variantes fáciles (con soporte para cabeza si no llega al suelo, cojín entre pantorrilas y nalgas, dedos de los pies metidos hacia rodillas) dependiendo de la limitación de cada cuerpo.

De pie: Uttanasana, Parsvottanasana o Prasaritta Padottanasana son algunos ejemplos, y todas ellas existen en su versión de media postura, como Ardha Uttanasana