Witch! (sí, te hablamos a ti)

Esta es la historia de cuatro mujeres unidas por una misión: recordarnos que todas somos brujas.

- IKERNE MESTRE

Navegando por el imaginario colectivo con un sombrero puntiagudo, una carcajada malévola y una nariz aguileña, la historia de las brujas –y de las mujeres en general– se ha tergiversado para encajar dentro de un mundo regido por el patriarcado y las teologías. Ivy, Dafne, Sofia y Natalia, integrantes de Tribu de Brujas, se han encargado de replantear el concepto desarraigándolo de cualquier cliché o prejuicio para cimentarlo en las bases del autoconocimiento, la sanación, el poder y la comunidad femenina.

EL (RE) NACER DE LA UNIÓN

Bajo el lema “Brujas somos y en tribu vamos”, este movimiento se creó por la necesidad de resignificar la relación de la mujer consigo misma y entre pares, equilibrando la energía masculina y femenina que existe en cada una. “Con el impulso de hacer consciente la naturaleza humana y la magia que habita en ella, nos reuníamos en círculo para encontrar cercanía, gentileza, autenticidad, vulnerabilidad y sanación”, nos cuentan las chicas de Tribu. Pronto sintieron el llamado de expandir tal práctica y comenzaron a compartir esta medicina de reconexión con otras mujeres que quisieran formar parte de la Tribu. Así fue como crearon espacios (desde su canal en YouTube y su perfil en Instagram, hasta talleres y retiros) “de sostén, mirada, apapacho, gozo y contención” –como ellas los detallan–, que fueran una guía para otras féminas ávidas de experimentar estos rituales de conciencia.