De las muchas y variadas vidas de don Miguel UN ELOGIO DE SERGIO RAMIREZ

Álvaro Espina es sociólogo, politólogo, historiador y ensayista. Ha sido profesor de Historia, Sociología y Estado de Bienestar en la Universidad Complutense. Fue alto funcionario en los Ministerios de Economía, Hacienda, Empleo e Industria, y consultor de organismos internacionales. Ha publicado más de ciento veinte libros y ensayos históricos, sociológicos y de política económica y social, y multitud de artículos de prensa, sin descuidar la preparación de la trilogía Cerbantes. Fue ayudante de José Antonio Maravall, a quien propuso una tesis doctoral sobre Cervantes y la mentalidad española en el Renacimiento tardío, Maravall pensó que el asunto era más bien propio de una obra de madurez y que debía escribirse en forma de novela. Casi cincuenta años después, Espina publicó Cerbantes en la casa de Éboli en esta misma colección, primera parte de una trilogía de novelas de la que ahora presenta la segunda entrega, Cerbantes cambista, marino, espia, cautivo, mientras el autor trabaja ya en la tercera y última, que llevará por título Cerbantes. El combate de las letras.

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Ahora, en Cerbantes, relata la vida de Cervantes durante todo el tiempo que vivió fuera de España, desde los veintidos hasta los treinta y cuatro años, de acuerdo con el contenido de un manuscrito encontrado en Orán que, según conjetura el autor de esta novela, pudo ser dictado por el propio Cervantes. El pasado 2 de marzo, el Premio Cervantes Sergio Ramírez, presentó el libro y este es el texto que reproducimos por cortesía de editorial Suma.

La lectura de Cerbantes cambista, marino, espía, cautivo, nos abre a la realidad de las múltiples y variadas vidas que tuvo este hombre del común que fue un cortesano o un valido más, un soldado herido en combate como tantos, un burócrata que pesaba metales y llevaba la cuenta de la paga de los soldados; unintrigante, un agente oculto del poder, un desafortunado que cae en manos de infieles y tiene la suerte de obtener su rescate; dueño de hazañas que nadie hubiera registrado porque no eran suficientes para entrar en los anales de la gloria. Y que, sin embargo, hoy tenemos en cuenta todo eso que nos narra cinco siglos después esta novela de Álvaro Espina; porque aquel personaje de segunda fila escribió el libro de los libros, la novela de las novelas, flor y espejo de aquel tiempo, de este que hoy vivimos, y de los venideros.