DESPUÉS DE LA FAMA

Desde el icónico beso con Tobey Maguire en Spider Man, Dunst navega en Hollywood evitando los estereotipos y pavimentando un posible camino hacia el Oscar con The Power of the Dog, una cinta aclamada por la crítica.

- FABIÁN W. WAINTAL

Cerca de cumplir 40 años, Kirsten Dunst demuestra su madurez tanto en el cine como en su vida personal. Después de vivir la cuarentena en Nueva Zelanda, trajo al mundo a su segundo bebé con el actor Jesse Plemons (más conocido como Todd en Breaking Bad) y regresó al cine con un desgarrador rol bajo la dirección de Jane Campion en The Power of the Dog (disponible en streaming). Y en una amena plática nos contó sobre su nueva cinta, los grandes momentos de su carrera, sus desafíos y secretos.

¿Cuál de todos tus personajes podría definir a la verdadera Kirsten Dunst?

Supongo que todos tienen algo mío, pero The Virgin Suicides o Eternal Sunshine y un poco de Elizabethtown se parecen a mí. No en todo, claro; sin embargo, cada rol representa diferentes facetas de mi vida, ¡aunque nunca fui infiel como en Elizabethtown (risas)!

¿Y con qué películas te recuerdan tus fans?

Depende del país. Si estoy en Francia, los fans suelen tener un gusto muy sofisticado y resaltan Eternal Sunshine (of the Spotless Mind). Y en Estados Unidos, definitivamente, es Spider Man.

¿La reacción más extraña de un fan?

Una vez una chica me invitó a su casa y me dio su número de teléfono. ¡Eso fue extraño!

En el plano profesional, a esta altura de tu carrera, ¿te molesta si te piden hacer un casting?