SUEÑOS DE VERANO

Adam Brown dejó un trabajo ordinario para enfocarse en sus dos grandes pasiones: la moda y el mar. Hoy, su firma Orlebar Brown lanza una exclusiva colaboración con IWC Schauffhausen.

- ALEJANDRO ORTIZ

Hace unos años, Adam Brown tenía dos trabajos: voluntario en una organización benéfica y fotógrafo. Si bien disfrutaba lo que hacía, sabía que no llegaría muy lejos y, sobre todo, que jamás cumpliría sus sueños. Amante del verano y la moda, a los 41 años, en un viaje a India, tomó la decisión que cambiaría su destino: crear su línea de ropa, completamente, a su capricho.

Orlebar Brown nació en 2007, especializada en “shorts para nadar” a la medida —“para la playa o la alberca, pero también para un restaurante”, dice Brown—, aunque pronto se extendió a camisas, polos, trajes de baño y blazers veraniegos. Hoy, el proyecto de este inglés se ha convertido en una firma global que opera boutiques en las ciudades más cosmopolitas —como Londres, Nueva York, Miami, París y Saint-Tropez— y trabaja con una larga lista de exclusivos distribuidores en el mundo.

Las colecciones de Brown, inspiradas en las escenas veraniegas de los sesenta creadas por el fotógrafo Slim Aarons, en especial alrededor de la vida en la Riviera francesa y en Palm Beach, son una conexión inmediata a la sofisticación que alguna vez representaron los viajes y las vacaciones de verano para la alta sociedad. Esta visión de la marca llamó la atención de Christoph Grainger-Herr y Christian Knoop, CEO y Director Creativo de IWC Schaffhausen, respectivamente, quienes lo contactaron para conocerlo mejor e intercambiar ideas.