Gears of War: Reloaded

MATANDO SUAVEMENTE CON LA SIERRA

- Rafael Aznar Miró

Puede gustar más o menos, pero la estrategia de Microsoft de lanzar sus juegos exclusivos en otras consolas se está demostrando exitosa, al menos en lo que a números se refiere.

Desde que la compañía de Redmond dio el salto al ámbito de las consolas con Xbox, casi siempre ha estado lejos de Sony y Nintendo en cuanto a cifras de venta de hardware, con la excepción de 360, que fue capaz de rivalizar con PS3. Sin embargo, One se quedó muy lejos de PS4, y lo mismo está sucediendo con Series XS respecto a PS5. Si a eso se le suman la existencia de un servicio de suscripción como Xbox Game Pass y los miles de millones invertidos en la última década en la adquisición de estudios y compañías (con Bethesda y Activision como joyas de la corona), se explica que Phil Spencer haya optado por llevar las producciones de Microsoft Studios a las consolas de la competencia. Baste como ejemplo el dato de que, en sólo unos meses, se ha-yan vendido tres millones de copias de la versión de