ANGELINA JOLIE Vuelve a sentirse actriz

Su retrato de la mítica soprano en María Callas, el nuevo biopic de Pablo Larraín, es prácticamente el primer trabajo interpretativo memorable que la actriz ofrece en los últimos 15 años, marcados por su relación con Brad Pitt

- Nando Salvá

Angelina Jolie es una estrella de cine como ninguna otra, porque para serlo dejó hace tiempo de depender de precisamente eso: del cine. Si su nivel de celebridad sigue siendo inmenso veinticinco años después de ganar el Oscar gracias a la sociópata a la que dio vida en Inocencia interrumpida (1999) es mayormente a causa de la encarnizada batalla legal que ha mantenido con su exmarido Brad Pitt, que recientemente parece haberse resuelto; al mismo tiempo, desde mucho antes de que esta empezara en 2016, ha sido francamente difícil verla encarnando un personaje memorable, y por eso es de agradecer la interpretación que la actriz ofrece al frente de María Callas, el biopic sobre la soprano griega que ha dirigido el chileno Pablo Larraín.

El retrato ya ha sido catalogado como el renacer artístico de una actriz que en los últimos 15 años había trabajado en cine casi exclusivamente prestando su voz a la saga Kung Fu Panda, o bien apareciendo en el tipo de películas de fantasía en las que nadie espera encontrar grandes alardes actorales, como las dos primeras entregas de la trilogía Maléfica o el fiasco Eternals (2021). Se le ha resistido, eso sí, la nominación al Oscar; ya se quedó a las puertas de ganar el Globo de Oro por el papel, y eso que las dos biografías de mujeres icónicas dirigidas anteriormente por Larraín, Jackie (2016) – sobre Jacqueline Kennedy– y