Sin inclusión laboral no hay inclusion social

Nueve de cada diez personas con discapacidad intelectual y grandes necesidades de apoyo no trabajan. En la mayoría de estos casos, no acceden al mercado laboral por falta de oportunidades, no de capacidad.

- Por Inma Garrido. Fotos D.R.

Cuántas veces nos hemos encontrado en una oferta de trabajo requisitos que no se adecúan al puesto que se ofrece. Las ofertas de empleo no realistas excluyen a grandes profesionales que podrían desempeñar el trabajo con total solvencia. En este sentido, el colectivo más perjudicado son las personas con diversidad funcional.

Hablamos con empresas que, tras analizar con precisión qué necesitaban para cubrir el puesto vacante, recurrieron a fundaciones que les ayudaron a encontrar el perfil que necesitaban. Porque todos tenemos limitaciones en algunas tareas y no por eso dejamos de ser capaces de hacer otras cosas.

WINABLE JEREZ DE LA FRONTERA

Es una pequeña empresa dedicada a las experiencias enoturísticas. Hacen catas, visitas a bodegas, formaciones y consultoría turística.

José Luis Baños, CEO de Winable, comenzó a trabajar con personas con discapacidad intelectual gracias a un voluntariado con la Universidad de Cádiz y Aspanido. Desde ese momento, tuvo muy claro que en el personal de cata de Winable habría personas con diversidad funcional.

Así es como Miriam Romero y Antonio García, dos jóvenes con síndrome de Down, forman parte del equipo de cinco personas de Winable. Se encargan de colocar los manteles de cata y los catavinos y de servir los vinos y conocen perfectamente los vinos de Jerez.