La revelación mexicana

El descubrimiento de los muralistas mexicanos fue un punto de inflexión en la obra y carrera de Johan Falkman. Hoy, enamorado de México, llama a este país su hogar por encima del que lo vio nacer.

- EDUARDO VENEGAS

Unos 9,500 kilómetros separan la Ciudad de México de Trelleborg, al sur de Suecia. Johan Falkman nació en ese pueblo en octubre de 1967. No obstante, hace tiempo que el pintor, escultor, retratista y muralista dejó de considerarla su hogar ("Cuando mi padre murió descubrí que él era Suecia, él era mi hogar") y mudó ese sentimiento a la capital mexicana. Aquí presentó el año pasado Desde la esfera del vacío: Cartas de reyes y sus antagonistas en el reino de los sueños, que documenta el desarrollo de la exposición del mismo nombre, compuesta por más de 150 pinturas y esculturas que involucran sitios tan disímiles como Suecia, Sudáfrica y México. Se exhiben en el Museo de la Cancillería capitalino este mes y luego emprenderá una gira por Aguascalientes, Guanajuato, San Luis Potosí y Monterrey. El documental fue el motivo del nuevo regreso de Falkman a México.

Inspirado por los muralistas mexicanos, Falkman trabajó en KwaZulu-Natal, Sudáfrica, de 2017 a 2022 (arriba y abajo) 

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