Cuando todo te da vueltas

El vértigo es más común de lo que imaginas. Te contamos cómo tratarlo

- Karen Robock

UNA MAÑANA DE invierno, el año pasado, Lynn Smith hacía estiramientos de yoga en el salón de su casa para relajar una contractura en la espalda baja. De pronto, esta mujer de 56 años se incorporó para sentarse y sintió algo extraño. “Empecé a ma- rearme como nunca”, recuerda.

Después de acostarse, le pareció que la habitación giraba. Había vivido su primer episodio de vértigo.

Este suele describirse como una sensación de movimiento más compleja que los mareos. Los zumbidos en los oídos, la pérdida del equilibrio, la visión doble y la dificultad para deglutir son otras manifestaciones frecuentes, que se presentan en función de la causa del vértigo. Los episodios pueden durar desde unos minutos hasta días.

Y aunque puede afectar a personas de todas las edades, es más frecuente a partir de los 40 años y en mujeres, aunque los expertos no entienden del todo por qué, explica el Dr. Terry Fife, neurólogo del Instituto Neurológico Barrow en Phoenix (Arizona), y especialista en trastornos del equilibrio.

Es importante entender que no es una enfermedad en sí, sino un síntoma. Existen muchas razones por las que se presenta y puede ser de dos tipos: vértigo periférico y vértigo central.