Libros – Carson McCullers – Queridos freaks

 

- Bruno Juffin

Ya sea en la cárcel, en una jaula o en la calesita con caballos hechos de madera de la que es responsable uno de los protagonistas de El corazón es un cazador solitario, en las novelas de Carson McCullers se dan muchas vueltas en círculo. En una obra extensamente autobiográfica y atormentada por la espera –de una partida, de un encuentro, de cualquier acontecimiento pasible de romper la agobiante monotonía de los días–, también se da vueltas y se dejan patas para arriba a las personas cercanas. Y cuando, después de dar muchas vueltas sobre si decir o no lo que se está por decir, finalmente se lo dice, se suele incurrir en la falta de respeto a cierto protocolo que se aplica en el sur de los Estados Unidos y que rige el comportamiento de las jóvenes en sociedad.

Durante su infancia, Carson McCullers –su apellido era Smith– era mucho más del estilo de Tom Sawyer que de Scarlett O’Hara –protagonista de