Amigos a cualquier edad

Un experto explica por qué los amigos son especialmente importantes en la vejez

- Ulrich Schnabel y Martin Spiewak

HACER NUEVAS amistades a los 20 años es parte de la vida diaria. ¿Pero a los 60 o a los 80 años? El psicólogo Oliver Huxhold investiga cuándo se aíslan las personas. Y cómo lograr evitarlo.

PREGUNTA: ¿Por qué es más difícil hacer amigos en la vejez?

OLIVER HUXHOLD: A lo largo de la vida cambian tres cosas: tenemos menos oportunidades de encontrarnos con personas nuevas; tenemos menos tiempo y energía que en la juventud, debido al trabajo y la familia; y por último, también disminuye con la edad la motivación para hacer nuevas amistades.

¿Por qué disminuye la motivación?

Con los años nos volvemos más selectivos con nuestras amistades y, parecemos menos abiertos a cosas nuevas. Nos da miedo acercarnos a otras personas, por ejemplo, por temor a ser rechazados o porque creemos que no es apropiado dirigirse a desconocidos. Pensamos: “Están ocupados, tienen su propia vida”.

¿Pero realmente necesitamos amigos? ¿No basta con tener una familia?

Sabemos que las buenas relaciones sociales tienen un impacto muy grande en nuestro bienestar. Al observar más de cerca, queda claro que los efectos positivos de las amistades suelen ser incluso más fuertes que los de la familia.

¿Cómo se explica eso?

Las amistades son vínculos que elegimos libremente. No se basan en leyes ni en lazos de sangre, sino en la simpatía y la cercanía. Eso hace que las amistades sean tan valiosas. Y además tienen varios efectos positivos. Por un lado, el apoyo social es útil en muchas áreas: por ejemplo, si quiero hacer deporte o seguir una dieta, es más fácil hacerlo con amigos. Además, los amigos nos confrontan con otras ideas y experiencias; nos sacan de la rutina diaria. Eso ayuda a prevenir el deterioro cognitivo.

Entonces, ¿los buenos amigos nos hacen más saludables?