Ciberacoso a futbolistas, focos rojos en la Liga MX Femenil

Scarlett Camberos, jugadora del América, ha sufrido ciberacoso de parte de un presunto aficionado. La agresión tuvo tal impacto que ella viajó a Estados Unidos y no ha regresado a México porque teme por su seguridad. Su caso es uno más de los denunciados en redes sociales. Y pese a que se trata de un problema mundial, un experto consultado por este semanario traza el camino que deben seguir equipos, afición y la sociedad para erradicar la violencia digital.

- KARLA CABRAL

Acinco años de la creación de la Liga MX Femenil se han denunciado diversos casos de acoso mediático y violencia digital contra futbolistas, hechos que se han quedado impunes y sólo generan un antecedente público.

Recientemente la jugadora mexicoamericana del América Femenil Scarlett Camberos fue violentada por un supuesto aficionado al grado que la futbolista no ha regresado a México porque teme por su seguridad.

En entrevista con Proceso, el especialista en ciberacoso Marito Pino, creador de la campaña contra la violencia digital “Piensa Antes de Publicar”, explica que el caso Camberos no es aislado, pues se trata del reflejo social y un problema grave que ha aumentado con el crecimiento de las redes sociales.

“El ciberacoso va más allá de una institución o de una liga, la noticia no es que deje al América, sino qué siente la gente cuando le vulneran su realidad y se quiere ir. El problema es que usamos el bullyng de una manera sistemática para distraer la realidad de la gente, nosotros como sociedad estamos vulnerando la reputación de las personas, o sea, nosotros mismos estamos exponiendo a las personas a que pasen este tipo de cosas.”

El ciberacoso o violencia digital es una problemática mundial, sólo en México datos arrojados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), mediante el Módulo sobre Ciberacoso (Mociba), indican que en 2021, 21.7% de la población usuaria de internet vivió alguna situación de acoso cibernético, esto corresponde a: 17.7 millones de personas afectadas, entre las cuales 9.7 millones fueron mujeres (22.8%) y 8 millones fueron hombres (20.6%).